Publicado el: 13/2/2015
Autor/es: Fernández Mayer,A.E. Nutricionista de INTA Bordenave (Buenos Aires, Argentina), Chiatellino. D. Ing. Agr. Y Productor Agropecuario.
Resumen
El destete precoz (DP) es una técnica que permite separar o destetar al ternero de la madre dentro de los 60 a 90 días de nacido con un peso vivo (p.v.) de alrededor de 60-80 kg hasta los 150/160 kg p.v.. Esta técnica se emplea en regiones donde por efectos de la sequía o cualquier otro acontecimiento climático o ecológico que atenta contra la alimentación de las vacas y su futura vida reproductiva, por ello al separar el ternero de la madre provocan, por un lado una fuerte reducción de los requerimientos de la vaca, y así puede recuperar su estado corporal y por el otro se garantiza una mejor atención del ternero. Normalmente, la alimentación de los terneros consiste en el empleo de Alimentos Balanceados (A.B.) especialmente formulados para esta categoría. Estos concentrados son, normalmente, costosos. De ahí que se diseñó un trabajo que reemplazo el A. B. comercial de D.P. por una ración compuesta por grano de maíz (seco y molido) y Pellets de Cebada que es un subproducto de las Materias, que elaboran malta para cerveza. Este subproducto reúne una excelente calidad, energética y proteica, que garantiza un adecuado concentrado para esta categoría de animales. Durante 10 años (2001-2011), y se continua, se viene evaluando en el sudoeste de Buenos Aires (Argentina) esta ración. El periodo en estudio tuvo una duración promedio de 87 días, con un peso inicial de 75 kg y final de 145 kg. p.v. Para ello se usaron en estos 7 ejercicios un promedio anual entre 700 a 800 terneros Angus, obteniéndose una ganancia diaria de peso, media, de 820 gramos. En conclusión: el Pellet o raicilla de cebada es un suplemento muy adecuado para integrar junto al grano de maíz (seco y molido) una ración balanceada para DP, en una proporción del 60:40% respectivamente. Esta ración permitió cubrir los requerimientos de terneros de destete precoz en más del 90%, tanto a nivel proteico como energético, alcanzando altas ganancias diarias de peso y muy baja mortalidad. Este último punto, la mortalidad, es un tema crítico en esta categoría de animales ya que son muy vulnerables. Mientras que su costo fue un 47% del valor del AB comercial, especial para DP.
Introducción
El destete precoz (DP) es una técnica que permite separar o destetar al ternero de la madre dentro de los 60 a 90 días de nacido con un peso vivo (p.v.) de alrededor de 60-80 kg. Este tipo de recría se extiende hasta alcanzar aproximadamente los 150/160 kg. p.v., pasando por diferentes etapas de alimentación. La técnica del DP es muy empleada en zonas marginales donde, por problemas de clima y/o suelo, las condiciones son adversas para la producción de forraje fresco y con él, se afecta seriamente la alimentación tanto de la vaca como la de su ternero, ya que se deprime la producción y calidad de la leche materna.
Esta técnica tiene varias ventajas:
- La madre se beneficia al suprimirse el acto fisiológico de la lactancia al suspenderse el estímulo del ternero (amamantamiento). De esta forma, la vaca recupera el estado corporal y el reciclaje de los celos (efecto reproductivo).
- Al mejorar la fertilidad de los celos se incrementan, significativamente, el porcentaje de parición y destete.
- El ternero recupera un buen estado físico y sanitario general, el cual fue afectado por una insuficiente alimentación (efecto productivo).
Sin embargo, para que esa recuperación ocurra es necesario suministrar al ternero, al menos, en los próximos 90-120 días pos destete una alimentación balanceada apropiada, compuesta por concentrados (energético y proteico) y un forraje fresco (cereales de invierno forrajeros, pasturas mixtas, etc.), ambos de alta calidad.
En la mayoría de los DP que se realizan en la Argentina se suministra, junto al forraje fresco de calidad, un Alimento Balanceado (AB) comercial formulado especialmente para esta categoría de animales.
Este AB es rico en proteína bruta (18-22% PB) y con un buen perfil de aminoácidos, alta digestibilidad (76-80%) y moderado nivel fibra (FDN: 22-26%).
Teniendo, sin embargo, como uno de sus principales inconvenientes el alto costo el cual oscila, en el mercado argentino, los 300 a 350 u$s/tonelada.
En este trabajo se evaluó una ración compuesta por Pellet de cebada (PC) y grano de maíz (GM) en reemplazo del AB comercial para DP.
Materiales y métodos
- Lugar: Establecimiento “La Esperanza” de la Flia Chiatellino en Guaminí (Buenos Aires, Argentina).
- Fechas y duración: El trabajo se realizó durante 12 años (2001 al 2013). La extensión, en promedio, fue de 85 días/ano.
- Animales: 700 a 800 terneros Aberdeen Angus (británicos)/tropa/ano
- Peso inicial: 75 kg. de peso vivo (promedio de los 10 años)
- Peso final: 145 kg. de peso vivo (promedio de los 10 años)
- Peso medio: 110 kg. (promedio de los 10 años)
- Ración (en estudio): Pellet de cebada + grano de maíz (seco y molido) + suplemento mineral
- Consumo de ración (en estudio): 2.35 kg. Ración/ ternero/día (199.75 kg. Ternero)
- Forraje fresco: verdeo de avena a voluntad (cereal forrajero invernal)
A los fines de elaborar una ración balanceada se consideraron los requerimientos de un ternero de 110 kg. de peso, que resulto promedio del periodo de DP (Tabla 1) (Cecava,1995).
Tabla 1: Requerimientos de un ternero (raza británica) de 110 kg. de peso vivo y una ganancia diaria de peso de 900 gramos diarios.
MS: materia seca / DMS: digestibilidad de la MS / PB: proteína bruta / EM: energía metabolizable
En la Tabla 2 se describe la composición nutricional de los ingredientes de la ración en estudio.
MS: materia seca / DMS: digestibilidad de la MS / PB: proteína bruta
Resultados
En la Tabla 3 se observa que la concentración proteica y energética de la ración en estudio (PC + GM) resultaron muy adecuados a los requerimientos, es más, la ración aporto un mayor nivel energético (+3%) que el demandado (Santini y Dini, 1986). Sin embargo, los requerimientos en calcio y fósforo no fueron cubiertos, especialmente del primero (-50%), esto indico la necesidad de adicionarle a la ración un suplemento mineral enriquecido, entre otras cosas, con calcio.
El pellets de cebada aporto el 70.00% y 55% del requerimiento proteico y energético, respectivamente. Mientras que el forraje fresco suministro entre un 15 al 20% de la MS total y un 10 al 15% de la PB requerida por el ternero.
Tabla 3: Balance de la dieta
En la Tabla 4 se presenta el Plan de Alimentación llevado a cabo durante el periodo en que se extendió este trabajo (12 años). Se observa en dicho cuadro que a medida que se incrementaba el peso vivo de los terneros se fue reduciendo la proporción de la ración e incrementando la del forraje fresco.
La ganancia diaria de peso, promedio de los 10 años del trabajo, fue de 820 gramos diarios por ternero.
Los resultados alcanzados durante el periodo que se evaluó la ración balanceada fueron excelentes. Estos resultados se demuestran por la alta ganancia de peso promedio (0.820 kg/día) y baja mortandad (1.5%). Además, se debe agregar que el costo de la ración balanceada fue de 170 u$s/ tonelada(1), alrededor del 40% del valor de los AB comerciales para DP. Mientras que el costo por kilo de ternero fue de 0.48 u$s/kg producido.
Tabla 4: Plan de alimentación
(1) Costos de los insumos empleados en la Ración balanceada: Pellet de Cebada: 150 u$s/tn y Grano de Maíz: 200 u$s/tn
Conclusiones
El Pellet o raicilla de cebada es un suplemento muy adecuado para integrar junto al grano de maíz (seco y molido) una ración balanceada para DP, en una proporción del 60:40% respectivamente. Esta ración permitió cubrir los requerimientos de terneros de destete precoz en más del 90%, tanto a nivel proteico como energético, alcanzando altas ganancias diarias de peso y muy baja mortalidad. Este último punto, la mortalidad, es un tema crítico en esta categoría de animales ya que son muy vulnerables.
A estos resultados se debe agregar que la ración en estudio resulto un 40% del valor del AB comercial, especial para DP. Con todo esto se puede concluir que el suplemento evaluado (PC) cumplió con todas las expectativas, tanto productivas como económicas.