10 de diciembre de 2010

FERTILIZACION FOLIAR de CULTIVOS (I)

Como les había prometido, iré publicando artículos y ensayos, para ampliar el conocimiento y comprender la importancia de esta nueva posibilidad de fertilización con aminoácidos a nivel extensivo.
Será importante ir leyendo los artículos para "armar" conceptos acerca del metabolismo de las plantas y el salto de eficiencia que puede significar el suplir a los cultivos, no ya con los macroelementos, sino con las moléculas específicas, listas para armar nuevas estructuras bioquímicas (proteinas, ADN, etc.).
Les dejo este primer trabajo de Eloy Molina.
Saludos.


Ing. Eloy Molina, M.Sc.
Centro de Investigaciones Agronómicas
Universidad de Costa Rica

1. Introducción

La fertilización foliar es el principio de aplicación de nutrimentos a través del tejido foliar, principalmente a través de las hojas, que son los órganos donde se concentra la mayor actividad fisiológica de la planta. La fertilización foliar es una excelente alternativa para aplicar micronutrimentos, los cuales son requeridos en cantidades muy pequeñas por las plantas. También puede servir de complemento para el suministro de elementos mayores durante ciertos periodos definidos de crecimiento de la planta, aunque en este caso la aspersión foliar no puede sustituir la fertilización al suelo como sucede con los
micronutrimentos.

En algunos cultivos, la fertilización foliar causa efectos adicionales, tales como el incremento en la eficiencia fotosintética, cambios en la fisiología de la planta, disminución de la senescencia y prolongación de la capacidad fotosintética de la hoja.

Objetivos De La Fertilización Foliar:

a) Corregir en forma rápida deficiencias nutritivas

b) Superar la falta de habilidad de las raíces para absorber los nutrimentos necesarios para su normal crecimiento

c) Suministrar los nutrimentos adecuados para la producción de frutos y semillas

d) Disminuir pérdidas en el suelo por fijación y lixiviación

Mecanismo de la absorción foliar


La hoja es el órgano principal de absorción foliar de nutrimentos, de ahí la

importancia de conocer su estructura. La hoja presenta una cutícula (membrana lipoidal), que es un obstáculo para la absorción. Debajo de la cutícula se encuentran las células de la epidermis, cubiertas por una delgada capa de pectina. La absorción de nutrimentos a través de la hoja es un proceso de múltiples pasos, e involucra la absorción superficial,
penetración pasiva a través de la cutícula, y absorción activa por las células de las hojas debajo de la cutícula.

La cutícula foliar es más permeable a los cationes que a los aniones. La hidratación
de la cutícula permite que ésta se expanda, apartando las concresiones cerosas sobre
su superficie y facilitando con ello la penetración.


Una vez que los nutrimentos pasan la cutícula, se encuentran con las membranas celulares de la epidermis, que presentan prolongaciones plasmáticas o ectocitodos, antiguamente llamados ectodesmos. Los ectocitodos son espacios interfibrilares que aparecen en las paredes celulares que rodean espacios llenos de aire. Los ectocitodos
forman un continuo que se extiende desde la parte externa de las membranas celulares hasta el límite interno de la cutícula, sin penetrar en ella. Su función principal es la de servir de vía para la excreción de sustancias, a la vez que permiten el paso de productos al exterior. Cuando los nutrimentos se encuentran en los ectocitodos, son translocados a las células epidérmicas por un proceso complejo de difusión y mediante gasto de energía metabólica. Un número alto de ectocitodos, una cutícula delgada y una gran área
superficial, favorecen la penetración de nutrimentos vía foliar.

Los agentes humectantes favorecen la absorción porque disminuyen la tensión superficial de las gotas. Los agentes tensoactivos pueden desplazar el aire que se encuentra en los estomas permitiendo la entrada de los nutrimentos.

2. Fuentes de fertilizantes foliares
Las características principales que debe tener una fuente para el abonamiento foliar es que sea muy soluble en agua y que no cause efecto fitotóxico al follaje. Las fuentes de fertilizantes foliares se pueden dividir en dos grandes categorías:
sales minerales inorgánicas, y quelatos naturales y sintéticos, (que incluye complejos naturales orgánicos).
Estas fuentes se formulan en polvos o cristales finos de alta solubilidad en agua, y en presentaciones líquidas.

2.1 Sales minerales inorgánicas

Las principales fuentes inorgánicas son yacimientos o minas naturales de óxidos, carbonatos y sales metálicas como sulfatos, cloruros y nitratos.
Los óxidos como ZnO2, Cu2O y MnO2, pueden ser utilizados, sin embargo su disponibilidad para las plantas es muy baja ya que son compuestos muy insolubles. Las sales fueron los primeros fertilizantes foliares que se utilizaron y están constituidos principalmente por cloruros,
nitratos y sulfatos. En comparación con otras fuentes, las sales son de menor costo, pero deben tomarse precauciones para su aplicación por el riesgo de causar quema o fitotoxicidad al follaje.

Los sulfatos son las fuentes más utilizadas debido a su alta solubilidad en agua y su menor Indice Salino en comparación con los cloruros y nitratos, por lo que hay menos riesgo de
quema del follaje.
 Los óxidos son relativamente insolubles en agua lo cual dificulta su distribución en fertilización foliar, y en aplicaciones al suelo debe ser molidos finamente para ser efectivos.
 Los oxisulfatos son óxidos que están parcialmente acidulados con ácido sulfúrico, y también presentan un grado de solubilidad en agua muy limitada.
Los sulfatos son las principales fuentes inorgánicas y pueden ser mezclados con otros fertilizantes.
Los sulfatos también suministran pequeñas cantidades de S a las plantas.
Los sulfatos usualmente son cristales, pero pueden ser granulados para facilitar su manipulación.
Los sulfatos de Fe, Cu, Zn y Mn son ampliamente usados en aplicaciones al suelo y foliares.
Los cloruros y nitratos se absorben más rápido a través de la cutícula foliar que los sulfatos, de acuerdo con los resultados de varias investigaciones realizadas. Aparentemente el efecto se debe a una mayor capacidad de permeabilizar la cutícula foliar por parte de cloruros y nitratos, y a su mayor poder higroscópico en comparación con los sulfatos.

Cuadro 1.

Fuentes de fertilizantes foliares a base de sales minerales inorgánicas

Fuente del elemento                 Fórmula            Contenido del elemento %
N
Urea                                      (NH2)2CO                           46
Nitrato de amonio                   NH4NO3                            33.5
P
Fosfato Diamónico (DAP)     (NH4)2PO4                          46
Fosfato Monoamónico           NH4PO4                              60
Fosfato Monopotásico            KH2PO4                             52
K
Nitrato de potasio                   KNO3                                 44
Cloruro de potasio                  KCl                                     60
Sulfato de potasio                   K2SO4                               50
Carbonato de potasio             K2CO3                               68
Ca
Nitrato de calcio                      Ca(NO3)2                         19
Cloruro de calcio                     CaCl2                                36
Mg
Sulfato de magnesio                  MgSO4.7H2O                   9.8
Kieserita                                   MgSO4.H2O                     16
Nitrato de magnesio                  Mg(NO3)2.6H2O               9
B
Borax                                       Na2B4O7 . 10 H2O           11
Pentaborato de Na                   Na2B10O16 . H2O            18
Tetraborato de Na                    Na2B4O7 . H2O                14
Solubor                                    Na2B4O7 . 5 H2O +
                                                Na2B10O7 . 10 H2O          20
Acido bórico                             H3BO3                               17
Cu
Sulfato cúprico penta                 CuSO4 . 5 H2O                  25
Sulfato cúprico mono                 CuSO4 . H2O                     35
Sulfato de Cu básico                  CuSO4 3 Cu(OH)2            13-53
Fe
Sulfato ferroso                           FeSO4 . 7 H2O                   19
Sulfato férrico                            Fe2(SO4)3 . 4 H2O             23
Fosfato de amonio ferroso         Fe(NH4)PO4 . H2O             29
Mn
Sulfato de Mn                            MnSO4 . 3 H2O                 26-28
Carbonato de Mn                      MnCO3                                31
Mo
Molibdato de sodio                    Na2MoO4 . 2 H2O              39
Molibdato de amonio              (NH4)6Mo7O2.4H2O             54
Zn
Sulfato de Zn                           ZnSO4 . H2O                          36
                                               ZnSO4 . 7 H2O                       31
Nitrato de zinc                         Zn(NO3)2.6H2O                    18
Fosfato de Zn                          Zn3(PO4)2                              51

Las sales son muy solubles por lo que tienen la desventaja de perderse fácilmente por lavado. Su velocidad de absorción es más lenta que la de un quelato. Para lograr un efecto positivo, las sales se aplican en dosis más altas que los quelatos. Entre sus ventajas están su costo más económico comparado con los quelatos, y su mayor concentración de nutrimentos.


2.3 Quelatos
Los quelatos son sustancias que forman parte de muchos procesos biológicos esenciales en la fisiología de las plantas, como por ejemplo en el transporte de oxígeno y en la fotosíntesis. Muchas de las enzimas catalizadoras de reacciones químicas son quelatos.
Otros ejemplos de quelatos biológicos naturales incluyen a la clorofila y la vitamina B12.
Un quelato es un compuesto orgánico de origen natural o sintético, que puede combinarse con un catión metálico y lo acompleja, formando una estructura heterocíclica. Los cationes metálicos son ligados en el centro de la molécula, perdiendo sus características iónicas.
El quelato protege al catión de otras reacciones químicas como oxidación-reducción, inmovilización, precipitación, etc. El proceso de quelación de un catión neutraliza la carga positiva de los metales permitiendo que el complejo formado quede prácticamente de carga 0. Esto es una ventaja para facilitar la penetración de iones a través de la cutícula foliar cargada negativamente, y de esta forma no hay interferencia en la absorción por efecto de repulsión o atracción de cargas eléctricas. De esta forma los quelatos pueden ser absorbidos y translocados más rápidamente que las sales debido a su estructura que los hace prácticamente de carga neta 0.
Esta mayor velocidad de absorción a través de la cutícula constituye una ventaja comparativa con relación a las fuentes de sales porque hay menor riesgo de pérdida del nutrimento por lavado y aumenta la eficiencia para la corrección de deficiencias.
Sin embargo, su costo es más alto que las sales y la concentración de nutrimentos es más baja, debido a que los agentes quelatantes tienen una capacidad limitada para acomplejar cationes.
Los quelatos pueden ser utilizados en aplicaciones foliares y al suelo. Todo catión polivalente es capaz de formar quelatos. La estabilidad de los quelatos difiere con el catión metálico: Fe > Cu > Zn > Mn > Ca > Mg.
Los agentes quelatantes también difieren en su habilidad para combinarse con un catión metálico.
 La fuerza con que el catión es acomplejado por el agente quelatante puede afectar su disponibilidad para la planta Los fertilizantes quelatados pueden ser fabricados mediante reacción química del catión metálico y el agente quelatante, o formulados mediante una mezcla
física de la fuente del nutrimento y el producto acomplejante. Durante el proceso de formulación de los quelatos, los iones metálicos son incorporados dentro de la estructura del agente quelatante en forma de sales solubles, para asegurar la disponibilidad del elemento y que el producto tenga una alta solubilidad en agua que facilite su aplicación en aspersión foliar.
Los quelatos son formulados para suplir nutrimentos individuales o combinados. Es común encontrar formulaciones que contienen varios nutrimentos, a menudo incluyendo todos los miconutrimentos y algunos elementos mayores como N, Ca, Mg y S. Estas fórmulas completas se les conoce como “multiminerales”.
Los quelatos para utilización en fertilizantes foliares pueden dividirse en tres categorías:
sintéticos, orgánicos de cadena corta, y orgánicos naturales.


Los quelatos sintéticos usualmente tienen una alta estabilidad. Uno de los primeros agentes sintéticos utilizados en fertilización foliar fue el EDTA (Acido etilendiaminotetracético). El EDTA es un agente muy versátil que forma complejos con metales catiónicos de gran 
estabilidad. Es muy utilizado en la industria química y alimenticia, como componente de jabones,
para retener el color de frutas enlatadas, y retener el sabor de salsas y mayonesas, etc.
Los agentes quelatantes más fuertes, tales como el EDTA, son usados también en aplicaciones al suelo, ya que su alta estabilidad impide que el catión metálico se pierda fácilmente. El EDTA es uno de los agentes quelatantes de mayor uso en la industria de fertilizantes foliares. Otros quelatos sintéticos incluyen el DTPA y EDDHA. En el cuadro 2 se presenta una clasificación de agentes quelatante de acuerdo con su poder acomplejante. La mayoría de los quelatos sintéticos se utilizan para acomplejar micronutrimentos.

Cuadro 2.

Agentes quelatantes agrupados de acuerdo con su poder quelatante

Fuerte                 Intermedio                      Débil

EDTA                                Poliflavonoides                                   Acido cítrico

HEEDTA                             Sulfonatos                                      Acido ascórbico

DTPA                               Acidos húmicos                                  Acido tartárico

EDDHA                            Acidos fúlvicos                                   Acido adípico

NTA                                   Aminoácidos

CDT                                Acido glutámico

                                         Polifosfatos                                                                

Cuadro 3.


Fuentes de fertilizantes con micronutrientes y quelatos sintéticos

Fuente                                        Fórmula                      Contenido del  Elemento %
Quelatos de Cu                          Na2CuEDTA                           13
                                                  CaCuHEDTA                            9
Quelatos de Fe                           NaFeEDTA                             5-14
                                                  NaFeHEDTA                           5-9 
                                                  NaFeEDDHA                             6
                                                  NaFeDTPA                               10
Quelatos de Mn                          MnEDTA                                  12
Quelatos de Zn                           ZnEDTA                                  6-14
                                                  NaZnNTA                                 13    
                                                  NaZnHEDTA                              9

Aminoácidos en fertilizantes foliares
Todos los seres vivos necesitan aminoácidos como unidades estructurales fundamentales para la formación de proteínas, enzimas y materiales de partida para la síntesis de otras
sustancias esenciales. Hasta hace unos años, la única forma de promover la formación de aminoácidos en las plantas era de forma indirecta y sólo a través del sistema radicular:
por medio de la adición de fertilizantes inorgánicos, el nitrógeno pasa a la solución del suelo y de aquí es absorbido por las raíces y transformado en aminoácidos. Este proceso exige a la planta un consumo energético muy alto que podría ser aprovechado en otros procesos biológicos.
En la actualidad, está demostrado que la aplicación al suelo o foliar de aminoácidos tiene un efecto muy favorable sobre la nutrición de los cultivos, ya que se le suministran los eslabones fundamentales para la formación de las macromoléculas biológicas, sin necesidad de pasos intermedios para la síntesis.
Al final de la década de 1970 surgió la alternativa de la fertilización directa de las plantas con aminoácidos libres. Este método evitaría la transformación química del nitrógeno nítrico y amónico dentro de la planta en aminoácidos y por tanto llevaría a ésta a un importante ahorro energético que le ayudaría a superar, tanto situaciones de estrés como para fomentar su crecimiento y desarrollo.
También se sabe que los aminoácidos están íntimamente relacionados con los mecanismos
de regulación del crecimiento y desarrollo vegetal. Algunas hormonas vegetales se encuentran unidas a aminoácidos o proceden de la transformación de éstos, lo que indica el importante papel que puede tener la aplicación de aminoácidos libres como fertilizantes.


Modo de acción de aminoácidos y carbohidratos
El principio básico que utiliza esta tecnología para la fabricación de fertilizantes foliares es la formación de proteínas hidrolizadas en las que se incorporan los nutrimentos catiónicos como Ca, Mg, K, Fe, Cu, Zn y Mn. Estos minerales quedan suspendidos entre dos aminoácidos que conforman los grupos donadores y uno de ellos, generalmente un grupo amino (NH2), forma un enlace covalente complejo, mientras el otro grupo carboxílico (COOH) forma un enlace iónico. De esta forma los iones metálicos quedan acomplejados dentro de la estructura formando un quelato orgánico. La carga iónica del metal es neutralizada por los aminoácidos en forma similar como ocurre con los quelatos sintéticos.
Esto evita que el metal sea sometido a fuerzas de repulsión o atracción por las cargas negativas de la cutícula foliar facilitando la absorción. La mayoría de los quelatos de aminoácidos son de bajo peso molecular, lo que en teoría favorecería también la entrada del quelato a través de la cutícula, las paredes celulares y las membranas celulares.
Una de las ventajas más reconocidas de los aminoácidos es su rápida absorción, que en algunos casos oscila entre 1-3 horas para completar el 50 de absorción.
Otro principio que utiliza esta tecnología es que la planta recibe aminoácidos biológicamente activos de rápida absorción y translocación, lo cual reduce el gasto de energía metabólica por parte de la planta en la síntesis de proteínas. También se le atribuyen propiedades bioestimulantes en el crecimiento vegetal.
Los quelatos de aminoácidos y de carbohidratos son de más rápida absorción que los quelatos de EDTA. Los quelatos de aminoácidos tienen mayor movilidad dentro de la planta una vez que han sido absorbidos, y además poseen propiedades bioestimulantes del crecimiento vegetal.

3. BIBLIOGRAFÍA

Bertsch, F. 1995. La fertilidad de los suelos y su manejo. San José, Costa Rica, ACCS.
157
Boaretto, A.E.; Rosolem, C.A. 1989. Adubacao foliar. Vol. I y II. Fundacao Cargill,
Campinas, Brasil. 669 p.
Enyelstad, O. 1985. Fertilizer technology and use. 3th ed. SSSA Madison, Wisconsin.
663 p.
Espinoza, J. 1996. La nutrición foliar. Informaciones Agronómicas (INPOFOS). No. 25:
4-9.
Hignett, T.P.; McClellan, G.H. 1985. Sources and production of micronutrient fertilizers.
Fertilizer Research : 237-259.
Hsu, H. 1986. Chelates in plant nutrition. In: Foliar feeding of plants with aminoacids
chelates. California, USA. pp. 209 - 216.
International Fertilizer Development Center. 1979. Fertilizer Manual. Muscle Shoals,
Alabama. 353 p.
Kuepper, G. 2000. Foliar fertilization. ATTRA Project, USDA. 11 p. http://www.attra.org/
Lorenz, O.; maynard, D. 1988. Knott’s Handbook for vegetable growers. 3º ed. John
Wiley and Sons, New York. 456 p.
Loué, A. 1988. Los microelementos en agricultura. Ediciones Mundi-Prensa,
Madrid, España. 354.
Malavolta, E. 1990. La fertilización foliar: bases científicas y significado en la agricultura.
Suelos Ecuatoriales 20(1): 29-43.
Morverdt, J. 1991. Micronutrients in Agriculture. 2ª. ed. Soil Science Society of America.
Madison, Wisconsin. 760 p.
Rosolem, C.A. 1992. Eficiencia da adubacao foliar. In XX Reunion Brasileira de Fertilidade
do Solo e Nutricao de Plantas, Fundación Cargill, Piracicaba, Brasil. P. 315-351.
Santos, A.T., Aguilar, D. 1999. Fertilización foliar, un respaldo importante en el rendimiento
de los cultivos. Terra 17(3): 247-255.
Segura A. 1993. Aspectos básicos de la fertilización foliar. In IX Congreso Agronómico
Nacional, Colegio de Ingenieros Agrónomos, Vol. 1, Nº 70, Sesiones de actualización
y perspectivas. San José, Costa Rica.

6 de diciembre de 2010

OBSERVAR LA NATURALEZA

Un buen Ingeniero Agrónomo, como hombre de campo, relacionado con la naturaleza, DEBE SER OBSERVADOR.
A diario, si somos agudos veremos que la naturaleza nos da señales de cosas que están pasando o que van a pasar.
Tal es el caso de los ataques de Isocas,  por ejemplo en estos días, sobre trigos madurando.
Si a la tardecita o la mañana temprano vemos sobrevolar Gaviotas y Chimangos sobre cultivos de trigo espigados... ¡vamos al lote a sacudir plantas y mirar el suelo! porque es casi seguro que tenemos un ataque del complejo desgranadora, integrado por la Isoca Desgranadora propiamente dicha (Faronta albilinea) y Militar Tardía (Spodoptera frugiperda), ambas muy mimetizadas con el color que en ese momento tenga el trigo.
Así que no le pierdan de vista a estos dos pájaros que pueden resultar buenos indicadores de ataques insectiles.
Otras aves a observar son los Teros, Garzitas Blancas y los mal llamados cuervos o Viuditas.

Barrenador del Tallo. Características y Control

Manejo del Barrenador del tallo de maíz Diatraea Saccharalis (Lepidoptera: Crambidae)

AUTOR: F. D. Fava; J. M. Imwinkelried y E. V. Trumper. INTA Manfedi, Argentina

Diatraea saccharalis, conocida como el "barrenador del tallo", es una de las plagas más importantes del cultivo de maíz en la Argentina, afectando también al sorgo, entre otros (Igarzábal et al., 1994). Este insecto ocasiona, en promedio, pérdidas totales medias de un 21% de la producción de maíz (Leiva y Iannone, 1993), lo que representa un valor estimado entre 150 y 170 millones de pesos por año (Ventimiglia et al.; 1999; Carta et al., 2000).

El barrenador del tallo tiene entre tres y cuatro generaciones anuales, según la región (Aragón, 1996). Las poblaciones de esta plaga aumentan desde la siembra hasta la cosecha de maíz (Parisi y Dagoberto, 1979; Dagoberto y Lecuona, 1982). La primera generación proveniente de larvas invernantes emerge en octubre y noviembre infestando gramíneas silvestres y cultivadas. La segunda generación de adultos, por lo general reducida, afecta al maíz en floración (siembra temprana). Durante la tercera y cuarta generaciones ocurren ataques generalizados afectando principalmente a lotes de siembra tardía que están en la etapa de llenado de grano (Aragón, 1996).

Las disminuciones en el rendimiento son ocasionadas por los daños que provocan las larvas. Éstas se alimentan primero de tejido foliar y a los dos o tres días (Alvarado et al., 1980) o después del segundo estadio (Greco, 1995) las larvas penetran en el tallo. Cuando el ataque se produce sobre una planta joven, las larvas pueden dañar el brote terminal provocando su muerte (Alvarado et al., 1980). En plantas más desarrolladas, el efecto directo por la construcción de galerías produce disminución del rendimiento de la planta al cortar los haces vasculares y disminuir la conducción de fotoasimilados a la espiga (Alonso y Miguez, 1984). La presencia de un orificio o entrenudo barrenado por tallo genera una disminución de 2 a 2,5 quintales por hectárea (Iannone, 2001; Serra, 2003). Los efectos indirectos son el quebrado de plantas desde la fructificación a la cosecha, ingreso de diversos patógenos, siendo la podredumbre del tallo (Fusarium spp. y Sclerotium bataticola) la enfermedad más común, y pérdidas durante la cosecha por caída de espigas como consecuencia del barrenado del pedúnculo y base de las mismas (Leiva y Iannone, 1993).

Tecnologías de control

El manejo integrado de plagas esta basado en la conjunción de todas las técnicas disponibles en un programa para manejar poblaciones de organismos perjudiciales, de modo tal de evitar las pérdidas económicas y minimizar los efectos secundarios sobre el ambiente y sus consecuencias sobre la salud humana (Metcalf y Luckman, 1994).




Control biológico.

Numerosos enemigos naturales atacan los diferentes estados de desarrollo del barrenador del tallo. El estado de huevo es parasitado por Trichogramma sp. (Alvarado et al., 1980), alcanzando en algunas campañas entre 70 % y 95 % de parasitismo (Aragón, 1996). Los estadios larvales son parasitados por Apanteles sp., Ipobracon amabilis, Agathis stigmaterus, Paratheresia claripalpis. Los depredadores de huevos y larvas son Cycloneda sanguínea, Eriopis connexa, Coleomegilla quadrisfasciata, Chrysoperla sp., Coccinella sp., Hippodamia sp. y Doru sp.

(Alvarado et al., 1980, Aragón, 1996). La mortalidad promedio de huevos causada por parasitoides y depredadores fue de 18, 38 y 77 % en fechas de siembra de septiembre, octubre y diciembre, respectivamente (Andrian et al, 2003). En Manfredi, la mortalidad de huevos por depredación, parasitismo e inviabilidad varió entre 32 y 96 % entre enero y marzo de 2001 (Fava y Trumper, datos no publicados). Por otra parte, el hongo Beauveria sp. generó 16 y 23 % de mortalidad en larvas invernantes de D.saccharalis recolectadas de rastrojos de maíz provenientes de siembras de 1º y 2º época, respectivamente (Bueno, 2004). Esta información coincide con lo hallado por Lecuona (1990), quien registró para el sur de la provincia de Córdoba una mortalidad del 21.5%. La importancia de conocer la incidencia de los diferentes enemigos naturales en distintas etapas del ciclo del cultivo radica en la posibilidad de incluirlos en el cálculo del umbral económico (Trumper e Imwinkelried, 2003).




Técnicas culturales.

En nuestro país, las prácticas más recomendadas son siembras tempranas, cosechas anticipadas si se encuen- tran más de dos entrenudos barrenados o más del 5% de espigas (pedúnculo) dañadas a la madurez fisiológica (INTA, 1998), rotación de cultivos (Ven- timiglia et al., 1999), híbridos que tienen un buen comportamiento frente al ataque de las larvas (Alvarez et al, 1997) y la destrucción del rastrojo que contiene larvas invernantes, mediante labo- reo del suelo (Dagoberto, 1982; INTA, 1998). Esta última técnica ya casi no es utilizada debido a la gran aceptación por parte de los agricultores de la siembra directa. Esto ha favorecido el crecimiento poblacional de D. saccharalis, ya que la permanencia del rastrojo favorece la supervivencia invernal de larvas (Aragón, 2000). La densidad de larvas invernantes observadas en un rastrojo de maíz de siembra temprana fluctuó por debajo de 0.2 larvas por tocón, observándose una leve dis- minución a lo largo del tiempo. En rastrojo prove- niente de una siembra tardía, la densidad de lar- vas invernantes fue mayor, oscilando entre 0.4 y 0.6 larvas por tocón desde junio hasta mediados de septiembre (Bueno, 2004). Por esto y teniendo en cuenta que la capacidad de vuelo máxima de los adultos de D. saccharalis sería de 1500 m (Ro- ca, 2002), cabe pensar que la siembra de maíz en lotes situados a esta distancia o menos a rastrojos de maíz convencional, favorecería los ataques tempranos de la plaga.

Cultivares Transgénicos.

Una alternativa de control, surgida recientemente por medio de la biotecnología, la constituyen los híbri- dos de maíz Bt, TD, etc., a los que se les incorporó un gen de la bacteria Bacillus thuringiensis (Bt), permitiéndole producir una toxina con propieda- des insecticidas para las larvas de D. saccharalis. Se estima que en la campaña agrícola 2000/2001 el nivel de adopción de esta tecnología alcanzó el 30 % del área maicera Argentina (Roca, 2002). Entre los beneficios del uso de maíces Bt puede destacarse que son altamente compatibles con los enemigos naturales y otros organismos no blanco de control; son inocuos para vertebrados y reducen considerablemente los costos ambientales y de salud asociados con el uso de insecticidas convencionales (Bauer, 1995). Como ventaja adicional se resalta que los insectos son tratados en el estadio de máxima sensibilidad, y la protección es independiente de las condiciones ambientales El maíz Bt tiene aspectos importantes a considerar antes de decidir su uso. Uno de esos aspectos es que esta tecnología tiene un costo adi- cional que varia entre U$S 20 y U$S 30 por ha (Pa- tiño, 2000). Este costo adicional se asume bajo cierto nivel de incertidumbre, ya que se descono- ce si la intensidad de los ataques de la plaga supe- rará el nivel de daño económico. Iannone et al, 2003 señalan que en la region pampeana sólo uno (Basi,1998). No obstante, en EE.UU. se han registrado casos en los que el maíz transgénico ejerció influencia negativa sobre insectos no-plaga (Cal- vin, comunicación personal).

El maíz Bt tiene aspectos importantes a considerar antes de decidir su uso. Uno de esos aspectos es que esta tecnología tiene un costo adicional que varia entre U$S 20 y U$S 30 por ha (Patiño, 2000). Este costo adicional se asume bajo cierto nivel de incertidumbre, ya que se desconoce si la intensidad de los ataques de la plaga superará el nivel de daño económico. Iannone et al, 2003 señalan que en la region pampeana sólo uno de cada cinco lotes resulta afectado por esta plaga.

Por otra parte, los agricultores que se inclinen por la siembra de híbridos transgénicos están comprometidos a destinar el 10 % de la superficie a la siembra de híbridos no transgénicos, implementando así la "estrategia del refugio" para manejo de la resistencia. De acuerdo a tal estrategia, no se recomienda el control químico de la plaga en la superficie refugio (Roca, 2002).

Debido a lo planteado anteriormente, la utilización de maíces Bt se recomiendan principalmente en siembras tardías o en siembras tempranas con planteos de alta productividad bajo riego, en los cuales el alto número de granos a llenar requiere de un elevado flujo de fotoasimilados hacia la espiga (Otegui y Cirilo, 2001).

Control químico.

El criterio de decisión para el manejo de D. saccharalis mediante control químico se basa en la identificación de picos de más de 100 adultos capturados con trampa de luz y la postura de huevos en plantas (Aragón, 2000). El monitoreo de adultos, sólo debe ser tomado como un indicador de la presencia de la plaga en el ambiente, pero no puede utilizarse per se para la toma de decisión de un control químico, ya que la captura esta influida por factores climáticos y la distancia de la trampa a lotes de maíz. Esto genera que en algunas ocasiones no se capturen adultos pero se encuentren oviposturas en el campo (Fava y Trumper, datos no publicados).

El umbral económico sugerido es de una ovipostura color naranja cada diez plantas de maíz (Iannone, 2001) o de dos o más oviposturas cada 10 plantas (Aragón, 2002), debiéndose controlar una generación en fechas de siembra tempranas y dos en tardías (INTA, 1998). El muestreo de las oviposturas debe realizarse revisando toda la planta, aunque existe una preferencia de las hembras por depositar los huevos en las hojas situadas en el estrato medio del hospedante (Moré, 2001). Si bien el control químico puede ser efectivo, tiene dificultades de orden práctico (Carta et al., 2000), ya que una vez que las larvas han penetrado en el tallo, quedan fuera del alcance de los insecticidas (Alonso y Miguez, 1984). Esto resalta la importancia de seleccionar el momento oportuno de aplicación química.
EC: emulsionable; GR:granulado; CS: Microencapsulado

Numerosos ensayos realizados con diferentes insecticidas han demostrado la efectividad del control químico. (Gonzáles Llanos et al., 1998; Canova y Ridley, 2000; Iannone 2001, Iannone et al., 2003). En INTA Pergamino señalan que para lograr un eficiente control de la plaga, las aplicaciones químicas con equipos terrestres deben realizarse con caudales de alrededor de 150 l/ha y una presión de trabajo de 70 lb/pg². En aplicaciones aéreas se debe utilizar un caudal de agua de 20 lts/ha o 10 lts/ha con el agregado de 2 lts/ha de aceite emulsionable. El objetivo de estos caudales es lograr alrededor de trece impactos de gotas por cm² a la altura de la espiga (Iannone, comunicación personal). La forma de comprobar la calidad de la aplicación se realiza mediante la colocación de tarjetas sensibles a la altura de la espigas y separadas entre sí por más de 30 m a fin de controlar diferentes pasadas del avión (Iannone, 2001). Las aplicaciones químicas deben realizarse preferentemente entre el atardecer y la noche.

Bibliografía

Alonso, S. N. y F. N. Miguez, 1984. El barrenador del tallo del maíz. Crea 109: 20-30
Alvarado, L., J. Basail, J. Bonel, J. Brasesco, A. Codromaz de Rojas, A. Conde, A. Coscia, E. Dagoberto, y otros. 1980. El cultivo del maíz. INTA. 88-102.
Alvarez, M. del P., G. Eyhérabide y D. Presello, 1997. Comportamiento de híbridos comerciales de maíz bajo infestación natural y artificial del barrenador del tallo (Diatraea saccharalis Fab.). Rev. de Tecnología Agrop. INTA, Pergamino. II (5): 40-43.
Andrían, M. L.; J. C. Gamundi, D. J. Bacigaluppo, P. Randazzo, E. Scrimaglio, L. Lenzi, M. Lago, A. Molinari, y I. Lazcurain, 2003. Determinación del umbral de tratamiento del 'Barrenador del tallo' (Diatraea saccharalis Fab.) según época de siembra en el sur de Santa Fe. Ensayo 1. En: Maíz para mejorar la producción N° 23, campaña 2002/2003. INTA. EEA Oliveros. pp. 99-102
Aragón, J. 1996. Las principales plagas del cultivo. Métodos de control. Crea: Maíz. Cuaderno de actualización técnica 57: 51-61.
Aragón, J. 2000. Sistema de alarma de plagas agrícolas con trampas de luz y observaciones de campo. http://www.mjuarez.inta.gov.ar/zoo/Sap 1298.htm
Aragón, J. 2002. Plagas de maíz y su control integrado. En: Guía Dekalb del cultivo de Maíz. E. Satorre et al. (Eds.). p 117-134. Monsanto Argentina S.A. Bs. As., Argentina.
Basi, S. 1998. Las consecuencias de la biotecnología. http//www.cairp.org/biotec.htm.
Bauer, L. S. 1995. Resistance a threat to the insecticidal crystal proteins of Basillus thuringiensis. Florida Entomologist. 78 (3): 414-443.
Bueno, D. 2004. Dinámica poblacional de larvas invernantes de Diatraea saccharalis (fab.) bajo distintas prácticas de manejo. Tesina para optar al título de Ingeniero Agrónomo. Universidad Nacional de Villa María. Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas. Centro Universitario Mediterráneo.
Carta H. G., L. A. Ventimiglia y S. N. Rillo, 2000. Maíz de segunda pero "de primera". Rev. de Téc. Agrop. INTA Pergamino. Bs. As. Argentina. V (14): 26-28.
CASAFE, 2003. Guía de Productos Fitosanitarios para la República Argentina. Tomo II. Undécima Edición.
Canova D.y N. Ridley, 2000. Programa de control de Diatraea saccharalis (F) (Barrenador de la caña del maíz) con el uso de cipermetrina-campaña 1999/2000. En: Jornadas de intercambio técnico de maíz,.AAPRESID. pp.54-62
Dagoberto, E. 1982. Ensayos de control cultural de Diatraea saccharalis (F) "Barrenador del Tallo".. Carpeta de producción vegetal. Maíz. INTA EEA Pergamino. Bs. As. Arg. IV (45): 8.
Dagoberto, E. y R. Lecuona, 1982. Dinámica poblacional de Diatraea saccharalis (F) (Lepidoptera: Piralidae) e incidencia del daño en el cúltivo. Carpeta de producción vegetal. Maíz. INTA, EEA Pergamino. Bs. As. Arg. IV (44). pp. 8.
Gonzáles Llanos, R., M. V. Gaitán y A. Etiennot, 1988. Comparación de dos métodos de control químico de barrenador del tallo del maíz (Diatraea saccharalis Fab.). IV Congreso Nacional del Maíz. Pergamino, AIANBA. Bs. As. 70-76
Greco, N. 1995. Densidad y número de generaciones de Diatraea saccharalis (Lepidoptera: Pyralidae) en el maíz de la zona marginal sur de la región maicera típica de la Argentina. Rev. Fac. de Agr., La plata. 71 (1): 61-66
Iannone, N. 2001. Control químico de Diatraea tecnología que apunta a la alta producción. Revista de tecnología agropecuaria. Divulgación técnica del INTA Pergamino. Vol. VI. Nro. 17. pp.33-37.
Iannone, N., A. Couretot y M. Cacciamani, 2003. Tecnología de control del barrenador del tallo Diatraea saccharalis Fab. Demostración técnico económica en cultivo de maíz. Revista de tecnología agropecuaria. Divulgación técnica del INTA Pergamino. Vol. VIII Nro. 22. pp.10-13.
Igarzábal, D., P. Fichetti y M. Tognelli, 1994. Claves prácticas para la identificación de larvas de Lepidoptera en cultivos de importancia agrícola en Córdoba (Argentina). Gayana Zool. 58 (2): 99-142.
INTA, 1998. Guía práctica para el cultivo de maíz. Actualización 1998. Eds. INTA; S.A.G.P. y A. y Cambio rural. pp. 13. Lecuona, E. 1990. Parasitismo natural de Diatraea saccharalis por el hongo entomopatógeno Beauveria bassiana.
Carpeta de producción vegetal. Maíz. INTA. EEA Pergamino. IX (94). pp 2.
Leiva, P. D. y N. Iannone, 1993. Bioecología y daños del barrenador del tallo Diatraea saccharalis Fab. en Maíz. Carpeta de producción vegetal. INTA Pergamino. Bs As. XII (113). pp 5
Metcalf, R. L. y W. H. Luckman, 1994. Introduction to insect pest management. John Wiley y Sons, New York.
Moré, M. 2001. Preferencia de oviposición y desarrollo de los estados inmaduros de Diatraea sacharalis F. (Lepidoptera: Pyralidae) en diferentes estados fenológicos de maíz (Zea mays L.). Tesina para optar el título de Biólogo. F.C.E.F. y N. - U.N.C.
Otegui M. E. y A. G. Cirilo, 2001. Producción de maíz: ¿cuándo y por qué usar los Bt?. Revista de tecnología agropecua- ria. Divulgación técnica del INTA Pergamino. Vol. VI. Nro. 17. pp.11-14
Parisi, R. y E. Dagoberto, 1979. Observaciones sobre el "Barrenador del Tallo" Diatraea saccharalis (F) en la campaña agrícola 1978/79. Carpeta de producción vegetal. Maíz. INTA, E.E.A Pergamino. Bs. As. Arg. II (15). pp. 4.
Patiño, J. P. 2000. Híbridos de maíz. A dónde va el mercado. Forrajes y Granos Agribusines Journal. 5 (53)
Roca C. 2002. Manejo de resistencia de insectos en maíces Bt. En: Guía Dekalb del cultivo de Maíz. E.Satorre et al.
(Eds.). p 135-140. Monsanto Argentina S.A. Bs. As., Argentina.
Serra G. V. 2003. Incidencia de Diatraea saccharalis(Fabricius) (Lepidoptera: Pyralidae) sobre el rendimiento del cultivo de maíz y comparación de tácticas de manejo químico y resistencia transgénica. Tesis de maestría. UNLaR.
Trumper E. V. y J. M. Imwinkelried. 2003. Influencia de los insectos benéficos en el control del umbral económico. Hoja informativa.
Vallone, P., C. Galarsa, V. Gudelj, G. Nieri, B. Masiero y M. Peretti. 2000. Primera evaluación técnico económica de los maíces transgénicos: Fechas de siembra de maíz común y maíz transgénico Bt. Campaña 1999-2000.
Ventimiglia, L. A., H.G. Carta y S. N. Rillo. 1999. Maíz Bt: una alternativa tecnológica para siembra de segunda. Rev. de
Téc. Agrop. INTA Pergamino. Bs. As. Argentina. IV (12): 53-55.

Trabajo publicado en el Boletín Nº 6 del INTA Manfredi, Argentina. 2004.

NUEVA PLAGA EN SOJA

ATAQUE DE ’CHINCHE DIMINUTA’ EN SOJA

01/dic/2010
Está afectando a sojas de 1ra, con riesgo para las sembradas más tarde; y puede irrumpir en la soja de 2da en su emergencia. Una simple revisión de los lotes evitará, nos tome desprevenidos

Por: Ing. Agr. Nicolás Iannone. (*)

Introducción

Poblaciones de chinche diminuta Nysius sp se observan en los rastrojos, ya desde hace tiempo, principalmente entre la cobertura de malezas o en la abundante broza de una buena siembra directa o como resultado de un quemado de malezas tardío, sitios de resguardo de estas pequeñas chinches. Lotes que tuvieron rastrojos enmalezados y con presencia de bolsa de pastor, entre otras malezas que la favorecen, son condiciones que prácticamente aseguran el impacto de la chinche diminuta.

Descripción de la plaga

Esta chinche es pequeña, de ahí su nombre vulgar "chinche diminuta", su tamaño adulto varía entre 4 a 5 mm de longitud y su ancho promedio es de alrededor de 1,5 mm.

Los adultos alados así como las ninfas o estadíos juveniles sin alas, suelen aparecer en altas densidades sobre la broza y plántulas de soja en el surco de siembra. Los adultos, por su tamaño y coloración negra, pueden ser confundidos con pequeñas moscas al volar sobre el rastrojo en grandes cantidades (parecieran enjambres o nubes de bichitos, según suele decirse, volando bajo sobre rastrojo). Con la ayuda de una lupa de mano podrá apreciarse que tienen ojos grandes, globosos y negros, coloración general grisáceo-negruzca, y antenas con 4 segmentos.

Los estadíos juveniles o ninfas son de menor tamaño aún que los adultos. No vuelan pero presentan alta movilidad, y cuando estas pequeñas ninfas están quietas suelen confundirse a simple vista con pulgones. A través de una lupa se podrá observar que las ninfas presentan una coloración rosada en el abdomen y negra en el tórax y cabeza. Los ojos negros prominentes y antenas de 4 segmentos son muy evidentes en ambos estados del insecto.

Condiciones predisponentes

Primaveras secas predisponen el desarrollo de este pequeño hemíptero perteneciente a la familia Ligaeidae y género Nysius sp, condiciones que pueden generar grandes poblaciones del insecto y su correspondiente impacto en implantación del cultivo.

La presencia de malezas, como "bolsa de pastor”, Gamochaeta (peludilla), y “lecherón", por ejemplo, favorecen el mayor impacto de la temible plaga.

Bolsa de Pastor









Gamochaeta











La presencia de abundante rastrojo en superficie favorece su crecimiento y desarrollo ya que le sirve de protección.

Daños

Afectan las plántulas de soja. Los daños son muy graves sobre todo en los primeros estados del cultivo. Durante la emergencia, el insecto pica los cotiledones pudiendo ocasionar la muerte de la planta.

Es frecuente la presencia de altas poblaciones de estas pequeñas chinches sobre el cultivo emergido, produciendo daños que en muchos casos obligan a la resiembra, o bien dejan al cultivo con un menor potencial de producción debido a la generación de grandes manchones con escasas plántulas sobrevivientes.

Síntomas

El picado de la chinche diminuta sobre los cotiledones de soja causa su deterioro, deformación, y un consecuente aspecto de roído y escaldado (aspecto amarronado-plateado), sintomatología que termina en necrosis y muerte de los mismos.

Las plántulas de soja normalmente no tienen posibilidad de recuperarse por el picado que también producen las chinches diminutas sobre el extremo del epicótile. De esta manera es afectado el crecimiento de las pequeñas plántulas, por necrosis del ápice foliar a la altura de las pequeñas hojas verdaderas en desarrollo. Como consecuencia de los daños se produce una rápida muerte de las plántulas, dejando manchones "pelados" en el cultivo.

No hay un umbral para chinche diminuta, fundamentalmente por la dificultad de contarlas (nubecitas de pequeñas chinches adultas en vuelo rasante sobre el rastrojo). Lo aconsejable es considerar el control ante la presencia de estas chinches en varios sectores del lote, más la visualización del comienzo de la sintomatología, es decir daños en los cotiledones y ápice de crecimiento de la plántula de soja.

Esta plaga está comenzando a presentarse en soja de primera en muchas zonas, con riesgo sobre todo para las sembradas más tardíamente, y también puede afectar la soja de segunda en su emergencia. Una simple revisión de los lotes evitará que nos tome desprevenidos, y por ende sufrir pérdidas de plantas en grandes rodeos. De ahí la importancia que tiene para el productor el estar en alerta por su posible presencia desde el momento de emergencia del cultivo. La soja de segunda tendrá mayores riesgos de sufrir un alto impacto de esta plaga.

Monitoreo del cultivo

Revisar fundamentalmente en la mañana temprano o a fin de la tarde (horarios donde su presencia se hace más visible). La característica de ojos prominentes, sumada a la de reducido tamaño y coloración general oscura, son los principales indicadores para la detección del insecto a campo, desde el mismo momento de la emergencia de soja.

La observación de daños en los cotiledones de la soja es indicador del inicio de su ataque, y por lo tanto una herramienta fundamental para la detección oportuna de la plaga y para evitar pérdidas de importancia.

No descuidarse en vigilar los lotes de soja desde el mismo momento de la emergencia, o antes de la misma, evitando hacer las observaciones en horas pico de insolación. Nubecitas de insectos pequeños y oscuros rasantes al cultivo (tipo enjambre) son los adultos alados de Nysius, mientras que las ninfas no vuelan pero se mueven muy rápidamente sobre plántulas y rastrojos.

La presencia de cotiledones con lesiones bien apreciables de color marrón son un serio alerta sobre el rápido impacto de la plaga que puede terminar con una abundante cantidad de plántulas muertas, o bien con rodeos dentro del cultivo prácticamente "pelados" con la densidad de plántulas diezmada por la plaga.

Control de la chinche diminuta:

El control se realiza con los mismos productos que son usados en chinche verde, pero con una reducción del 20 al 30% de la dosis. Al igual que en el control de las chinches tradicionales del cultivo de soja, el agregado de un piretroide mejora la eficiencia de control al incrementar la movilidad de las chinches, favoreciéndose de esta manera el contacto del insecto con las gotas del insecticida recientemente depositadas.

Para el logro de una mayor eficiencia de control resulta conveniente que la aplicación se efectúe en la mañana temprano o al atardecer (momentos de mayor actividad y exposición de estas chinches) y con el agregado de un buen tensioactivo.

(*) Grupo del Sistema de Alerta Servicio Técnico - INTA Pergamino
Fuente: AAPRESID

4 de diciembre de 2010

PRIMERA PROTESTA AGROPECUARIA ARGENTINA, EN MACACHIN !

Aunque muy distintas las condiciones, las causas y los actores... ocurrió en Macachin la primer Rebelión o Protesta de Productores Agropecuarios y ya que es Macachin el lugar en el que vivo desde hace 15 años quise compartir este relato con todos ustedes.
S.L.C.












La rebelión de los "rusos"


En noviembre de 1910, los chacareros de la zona de Macachín, quebrados por la sequía, reclamaron ante comerciantes y autoridades públicas por una salida. Ante el temor de una explosión social, el gobierno nacional envió tropas.
En la historia de los conflictos agrarios en el espacio pampeano la protesta protagonizada por los agricultores de origen "ruso" de la zona de Macachín en 1910 ha sido interpretado como el "mito fundante" de las reivindicaciones chacareras en la Argentina moderna.


Los hechos concuerdan que en ese año los estragos de la sequía causaron un desastre agrícola en el que se perdió toda la cosecha en la zona sureste de La Pampa Central y sur de Buenos Aires provocando un gran malestar entre los productores con la consiguiente intervención del gobierno nacional y la presencia de tropas para calmar los ánimos agitados. Debemos aclarar que el calificativo de "rusos" con el que se englobó a los chacareros encerraba toda una heterogeneidad de nacionalidades y orígenes de los colonos afincados en campos cercanos a Macachín. Entre ellos había ruso-alemanes o alemanes del Volga, judíos, húngaros, rumanos, además de otras nacionalidades en un porcentaje menor.


La crisis agrícola de 1910.


En 1910 la zona agrícola del sureste de La Pampa Central y sur de Buenos Aires sufrió un desastre agrícola sin precedentes causado por una persistente sequía y fuertes vientos, fenómenos registrados también en la siembra anterior. Esta crisis climática provocó la pérdida de lo sembrado en una zona que abarcó aproximadamente 1.000.000 de hectáreas.
A mediados de noviembre de ese año en Macachín, la prensa aseguraba que "ya muchos chacareros dan por perdida toda esperanza, y se ven obligados a sufrir de hambre, porque las casas de comercio les cierran todo crédito, en vista de que deben fuertes sumas, que ven que será imposible cobrar. Estos colonos abandonan sus chacras. Ha surgido la idea, entre muchos colonos, de dirigir una solicitud al Ministerio de Agricultura, solicitándole ayuda de semilla para el próximo año, y algún crédito para el sustento de sus familias".


La nota.
En la primera quincena de noviembre de 1910 se terminaron las esperanzas de que la lluvia pudiera revertir tal situación y los colonos quedaron en una mala situación al no poder pagar los créditos adquiridos con los comerciantes y sus arrendamientos para con los propietarios y colonizadores de la zona. La situación era desesperante y quedaron al borde de perderlo todo. Las casas de comercio, terminaron por retirarles los créditos para pagos de arrendamiento, manutención y gastos de siembra.
Ante la situación terminal, un grupo de 150 chacareros de la zona de Macachín decidió dirigirse al Ministerio de Agricultura para exponer la problemática por la que atravesaba la región y solicitar ayuda oficial. Se envió una delegación a la Capital Federal para reclamar al menos garantías sobre los animales y los útiles de labranza, que serían confiscados por los comerciantes ante las deudas. El 26 de noviembre, el representante diplomático de Rusia en Buenos Aires, entregó una nota firmada por los agricultores afectados de Macachín al ministro de Agricultura, Eleudoro Lobos, y este determinó que el 27 partiera una comisión de la Defensa Agrícola con un perito agrónomo para evaluar la crisis y remitir informes con posibles soluciones a tomar.


Los chacareros "rusos".
Pero la situación había llegado a un límite angustioso para esperar los estudios. El 28 de noviembre el gobernador Felipe Centeno en Santa Rosa recibió un telegrama del comisario de Macachín, Máximo Busso, en el que informaba que: "se presentó en la policía de este pueblo (Macachín), una delegación de ciudadanos rusos, acompañados de varios intérpretes, con objeto de hacer presente al comisario, que los colonos que ocupan las tierras situadas en los alrededores de esta localidad, en un número de 3.000 individuos, tienen el propósito de asaltar las casas de comercio, para proveerse de víveres. Dijeron al comisario esos recurrentes, que en caso de que les sean negados los artículos de primera necesidad llevaran a cabo saqueos, para lo cual cuentan con armas suficientes" .
La agitación chacarera tuvo como epicentro a Macachín por ser el nudo comercial y financiero del sudoeste pampeano, y de esta movilización participaron agricultores de las colonias La Argentina, La Merced, Sabadell y Campo de Aguirre, las más castigadas en la zona. La crisis agrícola provocó la exteriorización de ciertos propósitos de alzamiento de agricultores signados como "rusos" por las autoridades argentinas.
Entretanto, una delegación de chacareros se reunió al comisario Busso para informarle de esta determinación como representantes de los agricultores que tenían sus campos en inmediaciones de la localidad. El oficial de inmediato acuarteló al personal policial en la comisaría.


Asaltos dudosos.
Mientras esto pasaba, se sucedían algunas noticias sobre reclamos colectivos, o asaltos en menor medida, a las casas de comercio de la zona por parte de los chacareros, si bien muchos de estos hechos no pudieron después ser comprobados por la prensa.
El gobernador Centeno tras conocer los primeros informes, telegrafió al Ministerio de Guerra para que se enviara tropas para "garantizar el orden". El Jefe de Policía territoriano, Miguel Retolaza, fue comisionado ese mismo día por el gobernante a la zona en conflicto con personal de Santa Rosa, incorporándose poco después efectivos de las localidades de Uriburu, Lonquimay, General Acha y Guatrache. A su vez el gobierno nacional ordenó a Centeno que se traslade a Macachín "y que cumpla con su deber de evitar por medios pacíficos la perturbación del orden y los conflictos entre colonos y comerciantes".
El 28 de noviembre, tras ser recibido el telegrama de Centeno en el Ministerio de Guerra, aún sin conocer la situación partió desde Bahía Blanca a las 11.40 horas el regimiento 5º de Infantería con 150 efectivos a Macachín del que se sabía que "lleva munición, dos ametralladoras, un piquete escolta y equipo completo".


Pueblo tomado.
Los efectivos llegaron al día siguiente al pueblo pampeano y acamparon en la estación montando piquetes en algunas calles estratégicas mientras realizaba rondines por la noche. También desde la estación ferroviaria de Liniers arribó a las pocas horas al mando del teniente coronel Alfredo Olses el regimiento 8º de Infantería con 160 hombres y dos escuadrones del 2º de Caballería para recorrer las colonias. El periodismo comentó que las tropas llegaron de apuro, sin colchonetas ni otros elementos.
Parte de la prensa desestimó un hecho violento, indicando que en verdad habían sido sólo rumores tomados como verdad por el comisario y los comerciantes de la localidad. En las crónicas de esos días no hay hechos concretos de movilización en masa y se desmienten poco después las versiones de asaltos en los periódicos, aunque no es de desestimar que ocurrieran casos aislados.


Amenaza anarquista.
Si bien se había dado la alarma inicial por el temor a un levantamiento de los colonos, la posibilidad de un reclamo armado solo fue la amenaza o la exigencia de un grupo de chacareros, que serían identificados años después como de extracción anarquista, quienes exigieron a las autoridades que si el gobierno nacional no les enviaba ayuda asaltarían los comercios, y que a la medida estaban plegados otros agricultores. Entre este grupo, que en su mayoría sus "dirigentes" eran arrendatarios de la colonia Sabadell, nos encontramos con Martín Scheffer, que tendrá luego actuación durante la huelga agraria de 1912 en una delegación local de la Federación Agraria Argentina .
A la luz de los hechos posteriores, se puede entender que este suceso fue más una amenaza puntual que una movilización organizada. Un grupo reducido de hombres movidos por la situación de necesidad a causa de la crisis, pero seguramente sus voces representaban a las de muchos otros agricultores que los apoyaban en toda determinación por la situación de carencia concreta en que se encontraban.
De acuerdo al censo parcial levantado el 2 de diciembre por el gobernador Centeno tras su llegada a la zona, los números arrojaron un saldo de once colonias afectadas en el área de Macachín que incluían alrededor de 75.120 hectáreas y 613 personas mayores y 1.243 criaturas.


Los paliativos del gobierno
El 29 de noviembre llegaron a Macachín los delegados de los agricultores desde Buenos Aires con una contestación muy vaga del gobierno nacional que prometía "estudiar la situación" y que ofuscó a muchos.
Ese mismo día partió el gobernador Centeno a la localidad y se trasladaron también desde Capital Federal el presidente del Departamento de Trabajo del Ministerio del Interior, Marcos Avellaneda, para realizar un estudio sobre la crisis; y desde el Ministerio de Agricultura, el segundo jefe de la División de Estadística y Economía Rural, Florencio Molina, para llevar tranquilidad a los colonos damnificados, proveer las necesidades materiales y ofrecer ayuda para traslados a zonas de trabajo de aquellos que quisieran hacerlo.


Las noticias alarmantes y en la mayor parte de los casos poco veraces, continuaban sucediéndose. La prensa comentaba sobre niños fallecidos a causa del hambre reinante y sobre asaltos a comercios vecinos. De esta forma se exageraron temores y versiones infundadas de muertos y choques armados en Macachín.
También se observan en la prensa enrolada con el gobierno conservador algunas actitudes xenófobas en sus apreciaciones sobre las supuestas causas del levantamiento poniendo a los agricultores extranjeros como los causantes de la crisis vivida en el sur pampeano. Así, La Prensa refería: "los rusos son los que dan motivo a temores, por su actitud amenazadora. Se explica que los colonos de esa nacionalidad sean los que más sufren las privaciones, porque viven absolutamente aislados del resto de la población, siguiendo sus costumbres y hábitos, y casi en constante enemistad con todos los otros pobladores de otra procedencia. Por lo demás, no son económicos, gastan en golosinas y manjares finos, y abusan del crédito".








Tranquilidad.
El 1 de diciembre, a pedido de Centeno, regresó el regimiento 8 a su cuartel quedando dos escuadrones de caballería para recorrer la zona rural. En tanto, el gobernador y los oficiales de la policía visitaron, censaron y se reunieron con los cabecillas del movimiento chacarero. Grupos de veinte soldados de caballería fueron enviados a las colonias por temor a hechos de violencia y llevar tranquilidad.


Centeno ofreció trabajo a los agricultores como peones en otras zonas del territorio pagándoles los pasajes, cosa que muchos desestimaron por tener familia numerosa. Por lo pronto, se tramitaba el reparto de 15.000 $ m/n para paliar las carencias y se les prometió una ayuda en granos y dinero del gobierno nacional para reiniciar las cosechas.


El día 2 llegaron hasta Macachín, donde se había instalado Centeno, cantidad de chacareros en carros para reclamar una solución concreta. Alrededor de 150 vehículos de los colonos y sus familias rodearon la plaza. Pero el giro de 15.000 $ m/n para una primera ayuda del gobierno se hizo esperar, ya que no había casa que cambiara los cheques por dinero en efectivo en la zona.


Expansión.
La agitación agraria se extendió por todo el sureste siendo más problemático en la zona de Guatrache a Remecó, ya que ningún representante del gobierno se había dirigido hacia allí. El 3 de diciembre un destacamento del 2º de Caballería recorrió la zona y el enviado Avellaneda se entrevistó con diferentes comisiones formadas en los pueblos afectados.


Las quejas de los habitantes se fundaron en que había muchos representantes oficiales involucrados, pocos víveres y sobre todo, demasiadas promesas. Diversas reparticiones tomaron cartas en el asunto: el gobernador, el Director de la Oficina de Trabajo, funcionarios y empleados de distintas categorías y reparticiones de distintos ministerios que "sólo producen una confusión lamentable", indicaba la prensa, acotándose que todos habían llegado tarde y que fueron sorprendidos por los sucesos.


El día 7 comenzó a repartirse en Macachín los 15.000 $ m/n del auxilio enviado por el gobierno nacional, y la situación comenzó a volver a la normalidad.


Poco después, en 1911, tuvo entrada al Congreso Nacional un proyecto de ley que autorizó a gastar la suma de 1.000.000 $ m/n para socorrer a los chacareros de la zona, préstamo del que sólo se recuperarían 250.000 $ m/n dada la tolerancia en el cobro que tuvieron las reparticiones nacionales ante las malas cosechas subsiguientes.


Hasta en Roma.
Para fin del año 10 con la ayuda del gobierno ya nadie pensaba en miles de rusos armados, ferozmente teñidos de "ideas avanzadas" y que justificaran nada menos que el envío de dos regimientos del Ejército a un perdido pueblito en las márgenes del espacio pampeano. Aunque con algo de ridículo, el problema había sido conjurado.


Sin embargo, la trascendencia había sido mucho mayor de lo que imaginara el establishment conservador. El escritor Walter Cazenave recuerda que en 1912 el ex presidente Figueroa Alcorta realizó una recorrida por Europa en calidad de plenipotenciario. Durante su estadía en el Vaticano fue recibido por el Papa Pío X en una audiencia especial. Las crónicas indican que, en algún momento de la reunión, el pontífice le tomó la mano al embajador y, con los ojos húmedos, le preguntó emocionado: "Dígame, ¿todavía se muere de hambre la gente de Matachín?".


Norberto G. Asquini


LICENCIADO en Ciencias Sociales